Estamos acostumbrados a desarrollar productos, innovar en diferentes áreas de nuestras compañías, pero, ¿hemos considerado alguna vez que las diferencias culturales, diferentes países, pueden suponer diferencias cuando diseñamos nuestros productos y procesos?
Cuando nos internacionalizamos tenemos que escalar nuestro negocio considerando a nuestros clientes, productos e incluso nuestro modelo de negocio. También tenemos que defender nuestra posición y competir con competidores locales fuertes.
Tenemos una herramienta poderosa, aunque algunos de nuestros directivos piensen diferente, que es la innovación. Si disponemos de un producto muy novedoso e innovador, que realmente encaja muy bien en el mercado en el que estamos implantando nuestra estrategia de internacionalización, disponemos de una ventaja competitiva muy grande.
Cuando desarrollamos en nuestras organizaciones una cultura enfocada a la innovación, podemos descubrir más fácilmente muy buenas y rentables oportunidades de negocio. El Design Thinking puede ayudarnos a incorporar nuevos productos en los nuevos mercados en los que queremos tener presencia, pero tomando en consideración las diferencias culturales existentes, como pueden ser la propia lengua, la vestimenta, tradiciones, estilo de vida, el diseño, comida, costumbres.
Antes de que comencéis con una sesión de Design Thinking, intentar definir entre tres y cinco características de la cultura del país donde queréis desarrollar vuestra organización. Pero sobre todo ello, considerar también qué industrias y servicios están en ese momento en desarrollo o con buenas perspectivas de crecimiento, y que todo ello os permita terminar de decidir el proceso de internacionalización.
Para tener éxito en otros países y culturas, necesitáis que vuestras compañías sean excelentes en sus operaciones. La mayoría de las economías están demandando una calidad alta en los productos que se comercializan, de forma que, la opción de acudir a esos mercados en desarrollo o economías emergentes con segundas marcas o productos de inferior calidad no es tal opción.
Design Thinking (DT) os ayudará con una aproximación adecuada a vuestros clientes en esos mercados. En el caso de aplicar los cinco pasos del DT, podéis mejorar considerablemente los resultados en esos mercados. DT es una gran herramienta para ello. De manera que, ¡empatizar con vuestros clientes! Es muy importante observarles en el mercado y en sus empresas. Definir cuál es el problema o el asunto a resolver. Generar ideas nuevas e innovadoras con un brainstorming. No perdáis el tiempo, los prototipos son clave en esta fase. Dedicar tiempo a testear todo lo que habéis creado, obtener feedback, y finalmente iterar hasta obtener el resultado deseado.
Cuando estamos en un mercado diferente, las cosas suceden de manera diferente a como las podemos esperar. Ver cómo se comportan los mercados y los clientes será crucial para nuestro éxito. Saldremos ganando si comparamos las diferencias culturales que existen entre ellos y nosotros. En el proceso de Design Thinking, debemos considerar todas estas diferencias si queremos ser realmente innovadores enfrentándonos a los retos del mercado. Recomiendo que los directivos, marketing y la organización de ventas se encarguen directamente de esta actividad de observar. Ellos conseguirán información relevante para la toma de decisiones.
Si ponemos en práctica todo lo que hemos aprendido con el Design Thinking, podremos realizar actividades de benchmarking con los competidores locales. ¡Qué importante es observar a los competidores extranjeros y locales! Nos darán nuevas ideas que nos ayudarán a mejorar la oferta de nuestra cartera de productos.
Necesitamos organizaciones muy flexibles para superar los retos de los mercados a los que nos queremos dirigir. Pensar siempre, al involucrar a vuestros equipos en una actividad de Design Thinking, que las diferencias culturales afectarán de manera importante a vuestras decisiones. No intentar transferir vuestros usos y costumbres a otras culturas o países. Intentar adaptar lo que sabéis hacer a esas otras culturas.
Testear e implantar ideas, obtener el adecuado feedback del mercado y de vuestros clientes y después entrar en un proceso iterativo, será esencial para conseguir un éxito con el desarrollo de esas ideas en otras economías.
La Tecnología, la Transformación Digital, la Globalización y la Diversidad Cultural, determinarán el mapa del futuro de los negocios. No dudar en aprender y prepararos para cruzar fronteras. El mundo no es tan plano.